No resulta difícil encontrar publicidad tanto en televisión como radio o cualquier medio escrito donde empresas de crédito prometen determinadas cantidades de dinero en créditos concedidos en menos de 24 horas.
Estos préstamos económicos pueden sacarnos de un apuro económico temporal para hacer frente a múltiples imprevistos, pero sino andamos con un poco de ojo podrían meterse en un gran problema a largo plazo.
El truco de estos créditos rápidos está en el elevado tipo de interés que nos obligarán a pagar. Estos tipos pueden variar considerablemente entre las diferentes empresas del sector, pero no nos extrañaremos si nos hablan de un 25% o 30% de interés.
Estas cifras implica que los intereses a devolver, además del capital inicial, podrían representar una cantidad bastante elevada, lo que se podría convertir en un trampa que nos sacase de un problema para meternos en otro.
Si estás considerando pedir un crédito rápido analiza claramente el tipo de interés y realiza una planificación de tus ahorros para determinar como conseguirás en plazo el dinero relativo a los intereses y el capital del crédito.
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